Al carajo

"qué es el silencio? Di
aúlla solitaria la multitud
en la sala de los nichos."
Yván Silén



¿Has escrito y no te han sacado los ojos
no te han amputado las piernas
no te han olvidado lejos, allá, en el desierto?

Entonces, querido, no has escrito nada.

Oh... la opulencia lúdica de los seres razonables...
El virgilio de los diletantes....
si hubieras escrito algo
ya no tendrías piernas
ya no tendrías ojos
ya estarías en un volcán de lava,
a tus pies.


Tus peces, mis peces
son sólo pescados
y te sojuzgarán hasta matarte, si es necesario
en el extraverso que se esconde
en la metalengua.

La cueva, el hueco, los agujeros,
son,
al final, el sitio más respirable.

(la merced del octavo día
sólo es un tentempié
en las rodillas de un loro)

La repetición inacabada
de su hartazgo no deja, señores,
de ser rutina.

La finalidad de ser un prohombre
resta la dignidad de quien sufre la poesía.
El otoño de un verbo en infinitivo
no hace del verbo un otoño más rentable.

La suscripción a los brazos de mil musas
no avala una inspiración duradera
no acredita al limbo de los sueños
no otorga ni da beneficios
no exime al poeta de la hoja en blanco
no es perpetuidad satoriana
no es amor, ni siquiera un placebo.

Es el miedo de no ser nada y vencerse
a sí mismo
en una hoja haciendo sapuko.

Pero tu letra, mi letra
sólo es un ejercicio de mierda
en la insolencia de los que "escriben"
Seleccionado para ser censurado,
y en el peor de los casos
para hacer de ti un oprobio.

Pero la lengua daga no se dejará vencer
por chetos recalcitrantes,
egos desmedidos,
promiscuos de la palabra
o resentidos sin talento.

Esos, que juzgan y analizan
resignificando malamente
como si las tumbas mataran a los vivos.

Tu tumba me tumba,
pero no llega a tumbarme con su refrito
de graaaaandes escenas.

Porque al amputarme
y al quitarme los ojos
y al abandonarme sola en un
manicomio vacío me has dicho que existo
paralelamente (por suerte)
a tu verbo subjuntivo.

Y me dejas inamovible
danzando entre caimanes
fruta sincera de la pasión
entera
entre cientos de caras
que tu jamás has visto.